jueves, 21 de mayo de 2015

RICITOS DE ORO Y LOS TRES OSITOS (OTRA VERSIÓN).




Noticia del día:

Han rescatado una niña, aparentemente secuestrada por dos feroces osos, como los integrantes de la banda no han solicitado rescate, han liberado a la nena y ésta no ha querido presentar cargos éstos han sido de inmediato liberados.

Afortunadamente para nuestra publicación hemos logrado entrevistar a los protagonistas de esta noticia, ahora juzguen ustedes mismos, ¿qué es lo que realmente sucedió?

Versión de la niña, alias Ricitos de oro:
No se la verdad que pasó ni porqué arman tanto revuelo, mi amiga Mechitas de ébano, me invitó a su casa, donde vive con su mamá, a comer, me dio la dirección indicándome que quedaba exactamente en medio del bosque, que era una pequeña cabaña de madera, con ventanas adornadas con cortinas de florecitas y una enorme puerta de nogal que tenía una aldaba en forma de mano para tocar. Resulta que la encontré tal como me dijo, al llegar toqué y nadie respondió a mi llamado de pronto me percaté que la puerta estaba abierta y entré para luego darme cuenta que la casa estaba completamente sola, la comida estaba servida en la mesa, esperé un largo rato, tenía mucha hambre y me gruñía la tripita así que no pude resistir más y me comí la sopa del plato pequeño, que seguro era para mí por que  de las tres que íbamos ha comer yo soy la más pequeña. Después me entro una pereza y un cierto sopor así que decidí hacer una siestecita mientras llegaba mi amiga y su madre. Busqué un lugar donde hacerlo, para descubrir con placer que me habían preparado una camita, seguro es que saben que siempre después de comer hago la siesta, ¡que detalle!, todo era maravilloso, hasta que me despertaron tres osos que se habían metido en la casa y yo salí corriendo despavorida a mi encuentro salió la policía que mi madre había llamado, ¿sabe? es que se me olvidó avisarle que me habían invitado a comer, y ahora que recuerdo, creo que la invitación era para mañana, jeje.

Versión de los secuestradores, alias, Papá oso, Mamá osa.
No, no, y no, le digo que nosotros no secuestramos a esa delincuente, ella se metió en nuestra casa con qué se yo qué maquiavélicos propósitos, no solo allanó nuestro hogar, se comió toda la comida de nuestro hijo, anduvo deambulando por toda la casa, creo que hasta se bebió alguna de nuestras bebidas, porque después de hacer no sé que cosas, se puso a roncar sin decoro en una de nuestras camas. La Mamá osa ratifico la versión del Papá oso.

Versión de un testigo, alias osito.
Fue algo bien divertido, yo quería ir al parque porque tenía muchos deseos de jugar y quería evitar a toda costa comer la sopa de espinaca que había preparado mamá, porque la verdad no me gusta, así que cuando salimos, dejé la puerta abierta para ver si algún animal hambriento se comía la horrorosa sopa mientras nosotros andábamos de paseo, ¡y así fue!, sólo que en lugar de un animal entró a mi casa una pequeña hada y despareció mi comida, además se acostó en mi cama y así no tuve que hacer la siesta que tanto detesto, ya dormimos mucho en el invierno ¿no cree usted?; lástima que cuando entramos se asustó y salió volando como flecha, supongo que es que a las hadas no les gusta que las vean. En fin que yo estoy muy contento porque ya son las ocho y yo ¡no he tenido que comer la sopa ni tampoco hacer la siesta! y vamos a cenar avena ¡que es lo que a mi me encanta!


Yolanda de la Colina Flore
7 de agosto del 2014

Safe Creative #1408151766582

No hay comentarios: