Si me pinto alas
en lienzo infinito,
sortearé las balas
de un plano finito.
Y traspasaré esos ritos
tan antiguos y convictos,
así quedarán proscritos
las consejas y los mitos.
También tintaré el entorno,
en suaves tonos de malva
y borraré el desadorno
con los colores del alba.
Cual bello caleidoscopio
mi imagen al infinito,
pintando en eterno acopio
sin dejar ningún resquicio.
Yolanda de la Colina Flores
27 de octubre del 2016