Con pequeñas vocecitas
y moviendo sus manitas,
recitan en su teatrito,
diminutas princesitas.
Del Fénix de los ingenios,
se saben tres mil sonetos,
si Lope pudiese verlas,
quizás les diera un poema.
Cada una tiene un nombre,
de acuerdo a su posición,
la Pulgar adora a Tirso,
sus obras con sus enredos.
La Índice nos señala,
que pronto han de presentar,
al Burlador de Sevilla,
con su tremendo Don Juan.
A la pequeña Cordial,
le embeleza Calderón,
su genial comicidad,
le arrebola el corazón.
A ella le hubiera encantado,
conocer a este Señor,
pero tiene comprendido,
que los sueños, sueños son.
La pequeñita Anular,
que es muestra de compromiso,
se atreve sin un permiso,
diversión garantizar.
Y la ultima princesa,
que es la Meñique pequeña,
con su tierna vocecita,
nos dice con faz risueña:
Aunque somos diez hermanas,
cada una con su gemela,
jamás sabrán las de izquierda,
lo que hacemos las de diestra.
Así que la otra manita,
maneja otras cinco nenas,
recitando otros Poetas,
que desconocen las diestras.
Yolanda de la Colina Flores
28 de enero del 2012
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