ROBÉ

Robé de tu comisura tus besos y de tu iris su mirar,

robé con un deseo ambivalente que me mata y me revive,

robé en una desmedida locura de amarte y quererte,

robé suprimiendo el dolor como hedonista pura.

Robé porque estás lejos y aún no me perteneces,

robé como una adicta o viciosa de ti, porque el no tenerte

me causa los efectos perniciosos de la abstinencia,

robé con el nerviosismo de mi incipiente experiencia en el amor.

Robé también silenciosamente la dulzura de tu cuerpo,

robé sin un recato su encanto, su dulzura y su pasión

y luego, consecuentemente caí en las rejas de tu amor,

y ahora soy presa enjaulada y camino dando vueltas.

Si, vueltas doy en el rincón de tus delicias, en tus labios

sustrayendo en cada paso sus tiernos tibios ósculos,

y aquí en mi necesaria rotación sigo de tu ser hurtando,

esperando con placer que mi sentencia aqui se cumpla.

Para Toni de Yoli

14 de mayo del 2007