Hay hechos que no son justos
imposibles de arreglar,
por lo menos no se puede
con la ley de la razón.
Es posible festejar
a la mujer trabajadora,
por sus logros y sus metas
y lograr puertas abiertas.
A los hombres como padres
o grandes descubridores
con un nobel, con un beso,
y otros premios cual derecho.
A los niños y a las niñas
con un día internacional,
inundando los lugares
con mil juegos que brindar.
Dónde debo de dejar
a la mujer violentada,
la golpeada o mancillada,
la que no tiene un hogar.
Una fecha en calendario
no logra representar,
ni a la mujer ni a la madre,
padre o niño en igualdad.
En que sitio he de poner
a las niñas traficadas,
a las madres humilladas
y los niños vulnerados.
Los hombres esclavizados
o inocentes en la cárcel,
nuestros derechos civiles
pisoteados por los suelos.
Jurisprudencia de humanos
con mamotretos ufanos,
que sólo nos ha legado,
la justicia torticera.
Yolanda de la Colina Flores
2 de julio del 2016
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