jueves, 21 de marzo de 2013

MENUDITA SALSIFÍ Y CLARITA CASCARÓN Capítulo 3 (Cuento de Pascua)




Capítulo 3
La dulce espera de un guisante

Pepita Guisante se encuentra pensativa, sentada en su sillita junto a la mesita de té, vislumbrando los albores de la mañana a través de su ventana, al tiempo que saborea una suave infusión de hojas de limón con galletitas de miel de romero.

No puede participar en las diarias búsquedas que han realizado para encontrar a Clarita, pronto llegará un nuevo ser a su hogar y el médico le ha dicho que debe guardar reposo, a ella que es atleta de triatlón, le cuesta un poco adaptarse a esta nueva etapa de su vida, que la ha convertido en una sedentaria vaina.

Pepita no puede estarse quieta, siempre ha sido muy activa, así que aunque esté en un estado físico aparentemente pasivo, realiza posiciones de yoga, un tanto intrincadas para otros, pero que ella domina y le han sido permitidas por el galeno.

Después de una larga sesión de raja yoga y hatha yoga, Pepita se dispone a seguir con un  proyecto que ahora le mantiene ocupada, aprendió de su madre las técnicas del crochet y tricot y le fabrica al que pronto arribará un precioso ajuar.

Así que en una hermosa habitación que han construido para él, por el momento, la pequeña  cuna alberga ovillos de lana de texturas suaves, tiernas y dulces y un sinfín de ganchillos y agujas para realizar su labor, sobre todos los muebles de la bella recámara ella va extendiendo sus creaciones y después como en un intento de prueba los pone sobre su barriguita y frente al espejo observa cada una de las prendas ya terminadas.

Posteriormente toma otro ovillo y se dispone a iniciar una nueva tarea, ya sean gorritos, escarpines, chambritas o mitones, sus manos trabajan a una velocidad vertiginosa, es difícil seguirle en la tarea y casi imposible descubrir que puntadas está realizando, cuando menos se lo esperan de sus manos surge una nueva creación en tonos color pastel adornados con una buena dotación de lacitos de seda u organza y encajes de diversas formas.

Pepita está feliz con su dulce espera y sueña con tener entre sus brazos a su pequeño, para besarle, acariciarle y arrullarle hasta que se quede dormidito entre sus brazos, arropado por la ropita que ella ha hecho para él y por las notas tenues de una cálida canción de cuna. Entre ella y su marido han ideado un alud de nombres que ponerle, aún no saben que será, no quisieron saberlo, pues desean esperar y recibir la sorpresa cuando se dé el tan esperado nacimiento.

Ambos desean que su vástago sea tan deportista como ellos, sí así lo quiere él o ella, y que arribe al mundo verde y rozagante, en muchos momentos lo imaginan en sus brazos, después dando sus primeros pasitos o corriendo y huyendo del baño, para al fin acabar con la imagen de su hijo llegando a la meta en una carrera en el primer lugar.

Pepita teje que teje, y de pronto cesa su labor, piensa en Clarita, ¿qué habrá sido de su amiga y porqué ha sido imposible encontrarla?. Si al  menos ella pudiera hacer algo, pero ahí tan resguardada poca cosa puede hacer, de pronto viene a su mente una idea, ¡ para ella es una gran idea!, y en la próxima reunión de amigas se la comentará a Menudita, seguro le encantará y la acompañará en sus deseos de realizarla y luego juntas la llevarán a cabo.

Yolanda de la Colina Flores
Pascua 2013 


  Safe Creative #1303194798104

No hay comentarios: