Te adentraste a mi historia,
construyéndola de nuevo,
con el pulso y trazo firme
de escultor o de pintor,
con la magia y el portento
de Gaudi o de Dalí
Miraste en mi un lienzo blanco
y pieza de mármol sincero.
Con tus grandes y hermosas manos
fuiste poco a poco
matizándome
con los colores mas bellos.
Tus cincelazos precisos,
consiguieron que olvidara
lo que no necesitaba
y me convierten ahora,
en esta obra de arte,
que dices soy para ti.
Mi piel convertiste en lienzo
Mi piel convertiste en lienzo
donde tus besos
poco a poco
pusieron textura, forma y color,
y la naturaleza muerta
al fin desapareció.
Y el mármol de mi vida,
anteriormente sin forma,
se transformó
en una masa dúctil,
que tu moldeaste a tu antojo,
en dulce y tierna escultura.
Por ello eres el escultor
y el pintor
de esta mi vida,
con estas nuevas vivencias
que me han hecho
renacer.
Y ha tu lado
soy la misma,
hecha de lo que siempre he sido
pero
con una nueva forma
y vestida de color.
Yolanda de la Colina Flores
27 de mayo del 2007
No hay comentarios:
Publicar un comentario