Entre
campos y pastores,
por
las ramas y los bosques,
esta
princesa es deidad,
que
en los sueños suele estar.
Es
oráculo profético,
y
siempre las nuevas da,
con
métrica sin igual
ya
sea rimando o en verso.
Cuando
los pastores duermen,
sus
ganados ella cuida,
y
entre sueños los divierte
danzando
como una diva.
También del agricultor,
guarda
la siembra y la mies
y
del buen vinicultor,
de
la vendimia las mieles.
Como
solo por las noches,
esta
princesa aparece,
en
el día se divierte,
asustando
a los payeses.
Y
esta singular criatura,
les
hace desatinar,
con
su canto peculiar,
que
los logra hipnotizar.
Pero
también es verdad,
que
a todos logra encantar,
pues
si ella entra a tu hogar,
diosa
es de fecundidad.
Yolanda
de la Colina Flores
8
de junio del 2012
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muco
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